Por Washington Cabello
(PITTSBURGH, Pensilvania, Estados Unidos).- El asesino de la sinagoga de la congregación «Árbol de la Vida», había amenazado a los judíos a través de las redes sociales de la Internet, y tras ser apresado le dijo a la policía que «todos los judíos deben morir».
Asimismo Robert Bowers, tras penetrar al lugar de cultos alrededor de las las 10.00 de la mañana, vociferó las mismas palabras: «¡Todos los judíos debían morir!» y en seguida arremetió indiscriminada contra la feligresía, asesinando a 11 personas e hiriendo a una cantidad igual, que además de participar en el culto habitual, celebraban el inicio de un bebé en la fe.
El criminal, de 46 años de edad, blanco y de complexión robusta, resultó herido y se encuentra en un hospital en condición estable.
El presidente Donald Trump, pidió la pena de muerte para el tirador de Pittsburg: «Debería pagar con el castigo último», dijo.
La Fiscalía General de los Estados Unidos, está de acuerdo con el Presidente, ya lo ha acusado formalmente de 29 cargos de «delito de odio» y pedirá la pena de muerte para Robert Bowers.
El alcalde de la ciudad, Bill Peduto, describió la masacre como «el día más oscuro en la historia de Pittsburgh».
Las víctimas
El jefe médico de Pittsburgh, Karl Williams, dio lectura a la lista de las víctimas. “Las familias están en shock y en duelo, por favor, sean respetuosos ante sus necesidades, su tiempo y su espacio, mientras deben lidiar con esta tragedia”, dijo. Son:
Joyce Fienberg, 75 años, de Oakland, Pittsburgh
Richard Gottfried, 65 años, de Ross Township
Rose Mallinger, 97 años, de Squirrel Hill, Pittsburgh
Jerry Rabinowitz, 66 años, de Edgewood Borough
Cecil Rosenthal, 59 años y David Rosenthal, 54, hermanos, de Squirrel Hill
Bernice y Sylvan Simon, 84 y 86 años, casados, de Wilkinsburg
Daniel Stein, 71 años, de Squirrel Hill, Pittsburgh
Melvin Wax, 88 años, de Squirrel Hill, Pittsburgh
Irving Younger, 69 años, de Mount Washington, Pittsburgh.
El centro de salud de la Universidad de Pittsburgh, dijo que entre los heridos había una mujer de 61 años, un hombre de 52, un hombre de 27 y un agente de SWAT de 40 años. Otro agente fue atendido por heridas no graves. Así como que un hombre de 70 años tuvo que pasar por cirugía tras una herida de bala en su torso.
